Uso concomitante de ketamina y propofol en perfusión continua en cuidados intensivos: eficacia y seguridad para analgesia y sedación prolongada

Prospective observational study on the use of continuous intravenous ketamine and propofol infusion for prolonged sedation in critical care

Introducción

La analgosedación es una prioridad en el cuidado de pacientes en unidades de intensivos pediátricos. La combinación de ketamina y propofol puede ser una alternativa para aquellos pacientes con necesidad de sedación prolongada, con dificultad para la sedación y para disminuir el empleo de benzodiacepinas y opiáceos. El objetivo de este estudio es analizar la eficacia y seguridad de la combinación de ketamina y propofol en perfusión continua para la analgosedación en unidades de cuidados intensivos pediátricos.

Materiales y métodos

Estudio de cohorte única prospectivo observacional en pacientes de 1 mes a 16 años ingresados en unidades de cuidados intensivos pediátricos entre 2016 y 2018 que recibieron tratamiento con ketamina y propofol en perfusión continua para analgosedación. Se recogieron datos clínicos y demográficos, scores de analgesia y sedación (MAPS, COMFORT-B y SOPHIA), parámetros hemodinámicos y efectos adversos.

Resultados

Treinta y dos pacientes fueron incluidos. La dosis máxima de ketamina fue de 1,5mg/kg/h (RI 1-2mg/kg/h) y la duración, 5 días (RI 3-5 días). La dosis máxima de propofol fue de 3,2mg/kg/hora (RI 2,5-3,6mg/kg/hora) y la duración, 5 días (RI 3-5 días). Treinta pacientes (93,7%) habían recibido midazolam y 29 (90,6%) fentanilo previamente. Tras el inicio de la perfusión de ketamina y propofol la puntuación en la escala de analgesia no se modificó. El COMFORT-B mostró un incremento estadísticamente significativo, pero se mantuvo dentro del rango de sedación adecuada (12-17). Se produjo una leve disminución en la presión arterial media tras una hora de administración, que fue estadísticamente significativa (de 64mmHg a 60mmHg; P=0,006) así como en la presión arterial diastólica (de 50,5 a 48mmHg; P=0,023). Esta diferencia desapareció a las 12 horas del inicio y no requirió uso de drogas vasoactivas. No se detectaron efectos adversos graves durante la administración.

Conclusiones

La combinación de ketamina y propofol en perfusión continua es un tratamiento seguro en cuidados intensivos pediátricos que permite un adecuado nivel de analgosedación sin repercusión hemodinámica significativa.

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