Uno de los grandes obstáculos que presenta el trasplante de órganos es el tiempo en que se puede preservar el órgano en isquemia en un estado viable antes de ser implantado. Con la utilización de la técnica estándar de conservación estática en frío (4°C) los tiempos de conservación se limitan a 6-8 horas, tiempo conocido como tiempo de isquemia fría. Este comienza desde que se realiza el “cross clamp” o cese completo de la circulación en el donante hasta la irrigación del órgano implantado en el receptor.
Recientemente se han publicado estudios preclínicos y clínicos que demuestran beneficios de conservación del injerto a 10°C en comparación con el almacenamiento estándar, además de permitir una prolongación de los tiempos de isquemia con iguales estándares de seguridad para el receptor. Estas nuevas líneas de desarrollo apuntan a facilitar la logística del trasplante pulmonar transformándolo de una cirugía de urgencia a un proceso quirúrgico semi electivo. Dicho cambio ha demostrado beneficios en seguridad quirúrgica y resultados de sobrevida del implante aumentando los tiempos de preservación y abriendo incluso la posibilidad de abrir nuestras fronteras para programas internacionales.