La preferencia por los alimentos se basa en tres factores esenciales: el sabor, la textura y la apariencia. Tradicionalmente, el sabor ha sido considerado el más importante. Sin embargo, la encuesta ‘Taste Tomorrow’ de Puratos revela que, en tiempos recientes, la textura ha empezado a destacar, con un 69% de los consumidores españoles expresando su interés por probar productos con diferentes texturas. En la pastelería, por ejemplo, experimentar con diversas texturas puede enriquecer la experiencia de consumo y acercar a nuevos consumidores un segmento que en un principio no les atraía.Además, las diferentes texturas también mejoran la presentación visual de los alimentos, lo que lleva al tercer aspecto importante: la apariencia. Este último ha cobrado mayor relevancia, especialmente entre las generaciones más jóvenes, quienes valoran las experiencias “instagrameables” al momento de comer, es decir, que se vean bien en las fotos y que luzcan ‘apetecibles’. El estudio mencionado destaca tres sensaciones sensoriales que están captando la atención de los consumidores actuales en el ámbito de la pastelería: textura ‘chewy’, textura hojaldrada y combinaciones de texturas.Esta textura, similar a la de las populares galletas de caramelo gochujang, ha estado menos presente en la repostería occidental, pero su popularidad está en aumento. La textura “chewy” ofrece una experiencia de degustación “más duradera y placentera”, lo que permite que los sabores permanezcan en el paladar, aumentando el disfrute de los productos horneados.“Romper un croissant dorado para revelar sus múltiples capas es un placer singular”. La suavidad y el desmoronamiento de esta textura aportan “una experiencia multisensorial”, enriqueciendo los sabores y estimulando los sentidos tanto visual como táctilmente.Se trata de mezclar diferentes sensaciones sensoriales. Un ejemplo de esto es el “crookie”, una tendencia popular en TikTok, que combina un croissant tradicional con masa de galleta de chocolate semi-horneada. Este croissant está relleno de masa “chewy” y trozos de chocolate, coronado con una galleta crujiente, ofreciendo una experiencia “innovadora y deliciosa”.