Después de más de 16 horas de negociaciones entre los estados miembros y los parlamentarios de la UE, se ha aprobado la Ley de Servicios Digitales (DSA, por sus siglas en inglés). Esta nueva legislación permite multar a una empresa con hasta el 6 % de su facturación global, mientras que un caso de infracciones repetidas podría resultar en que se prohíba a la empresa en cuestión a hacer negocios en la UE.
Las nuevas reglas, que entran en vigor en el 2024, prohíben la publicidad dirigida al público infantil, o basada en datos sensibles como religión, género, raza y opiniones políticas; permiten que los gobiernos de la UE pueden exigir a las plataformas de internet la eliminación de cualquier contenido ilegal; obligan a las plataformas de redes sociales a permitir que los usuarios marquen de manera clara el contenido ilegal para poder eliminarlo, y obligan a tiendas online como Amazon a tener sistemas para identificar productos sospechosos, como falsificaciones o productos peligrosos para la salud.