La transformación digital implica la integración de tecnología en todas las áreas de una organización y un cambio en la forma de operar y de proporcionar valor. En el sector de la salud, la transformación digital debe centrarse en mejorar la salud para todos, acelerando el desarrollo y la adopción de soluciones digitales. La OMS considera la salud digital como un factor clave para garantizar la cobertura sanitaria universal, la protección frente a emergencias sanitarias y un mejor bienestar para mil millones de personas en todo el mundo. La transformación digital en salud debe incluir los determinantes digitales en salud como nuevos factores de desigualdad junto a los determinantes sociales clásicos. Abordar los determinantes digitales de la salud y la brecha digital es esencial para garantizar que todas las personas tengan acceso a los beneficios de la tecnología digital para su salud y su bienestar.