La hipersomnia idiopática (HI) es una patología frecuentemente crónica, incapacitante, polimórfica, de etiología y prevalencia desconocida. No existen marcadores biológicos ni test diagnósticos específicos, alcanzando el diagnóstico definitivo por exclusión de otras enfermedades.
Clínicamente el cuadro se caracteriza por somnolencia diurna excesiva, despertar emborrachado, performance reducido con problemas de atención y memoria asociados a manifestaciones autonómicas. La terapia continúa siendo sintomática, utilizando fármacos que han resultado efectivos en narcolepsia.
En este artículo revisaremos algunos puntos claves en relación a la prevalencia, etiología, criterios diagnósticos y manejo de la HI.