Introducción
El manejo de la epilepsia durante la gestación requiere un control óptimo de las crisis, evitando los potenciales efectos teratogénicos del tratamiento antiepiléptico.
Objetivos
Describir las características clínicas y los resultados perinatales de las pacientes con epilepsia gestantes. Analizar los factores que se asocian a la presencia de crisis durante la gestación. Describir los fármacos antiepilépticos más utilizados y analizar los cambios en el régimen terapéutico en dos periodos: de 2000-2010 y 2011-2018.
Métodos
Se realizó un estudio prospectivo observacional de pacientes con epilepsia que notificaron su gestación en el periodo de 2000-2018. Se evaluó a las pacientes en el primer y segundo trimestre de gestación, tras el parto y al año. Se recogieron variables demográficas, relacionadas con la epilepsia, perinatales y obstétricas.
Resultados
Se incluyeron 101 gestaciones. La edad media fue de 32,6 años, el 55,4% tenía una epilepsia focal, el 38,6% una epilepsia generalizada y el 5,9% indeterminada. Se registraron 90 nacidos vivos, nueve abortos espontáneos y cinco malformaciones congénitas, cuatro de ellas en monoterapia con valproato. En 40 gestaciones (39,6%) se registraron crisis, siendo tónico-clónicas generalizadas en 16 (40%). Las variables asociadas con la presencia de crisis durante el embarazo fueron el mal control el año previo a la gestación (66,7% vs. 15,1%, p < 0,001), el tratamiento con dos o más fármacos antiepilépticos (30% vs. 14,8% p < 0,001) y no recibir tratamiento (25% vs. 0% p < 0,001). Los fármacos antiepilépticos más utilizados en monoterapia fueron lamotrigina (n = 19, 27,1%), valproato (n = 17, 24,2%) y levetiracetam (n = 12, 17,1%). En el periodo más reciente (2011-2018) se encontró una mayor proporción de monoterapias (81,5% vs. 55,3%), además de un descenso en el uso de carbamazepina (23,1% vs. 2,3%) y valproato (30,8% vs. 20,5%); y un aumento marcado de levetiracetam (0% vs. 27,3%).
Conclusiones
Los factores asociados con la presencia de crisis durante la gestación fueron el mal control previo, el tratamiento con dos o más fármacos antiepilépticos y la ausencia de tratamiento. Los fármacos más utilizados fueron lamotrigina, valproato y levetiracetam, con un incremento de este último y un descenso de valproato en el periodo más reciente (2011-2018).