
La tromboembolia de pulmón (TEP) y la hipertensión pulmonar (HP) son comorbilidades frecuentes que empeoran el pronóstico de los pacientes diagnosticados de enfermedad pulmonar intersticial difusa (EPID). Pese a los avances en el diagnóstico y tratamiento de estas entidades, su impacto en el manejo y la progresión de la EPID no está suficientemente estudiado. Este artículo incluye una revisión y actualización del diagnóstico y tratamiento de la TEP y de la HP en pacientes con EPID de base.