Objetivo
Los síntomas de un ictus minor o un ataque isquémico transitorio (AIT) son leves y de corta duración. A pesar de la naturaleza pasajera de los síntomas focales y la ausencia de lesiones cerebrales visibles en algunos pacientes, muchos experimentan problemas cognitivos persistentes posteriormente. Nuestro objetivo es establecer el poder discriminativo del Montreal Cognitive Assessment (MoCA, «Evaluación Cognitiva de Montreal») en la detección del deterioro cognitivo (DC) dentro de los 90 días posteriores al AIT.
Método
Se incluyeron un total de 50 pacientes con ictus minor y AIT. Se les aplicó la prueba MoCA y una batería neuropsicológica formal. El DC se definió clínicamente según los hallazgos de las pruebas neuropsicológicas.
Resultados
La edad promedio de los pacientes seleccionados fue de 57,7±8,0 años, siendo la mayoría de ellos varones (70,0%). Todos los pacientes tenían un nivel educativo igual o superior al primario. Treinta y siete (74,0%) sujetos presentaron DC. Mediante el análisis de la curva característica del receptor se obtuvo un punto de corte del test MoCA de 25 puntos para discriminar entre sujetos con y sin DC, siendo el área bajo la curva de 0,835 (intervalo de confianza del 95% [IC 95%] 0,720 a 0,949), la sensibilidad, del 78,4% (IC 95% 62,8-88,6%), la especificidad, del 76,9% (IC 95% 49,7-91,8%), el valor predictivo positivo, del 90,6% (IC 95% 81,0-95,6%) y el negativo, del 55,6% (IC 95% 39,5-70,4%).
Conclusiones
Más de la mitad de la muestra presentaba DC según lo determinado por la batería formal de pruebas neuropsicológicas. Un punto de corte de 25 en el MoCA es lo suficientemente sensible y específico para detectar DC tras un ictus minor o AIT y podría implementarse en la práctica clínica como método de cribado.