La cirugía bariátrica (CB) ha demostrado su eficacia y eficiencia, pero solo el 1% de los pacientes seleccionados llegará a recibirla.
En comparación con el tratamiento médico de la obesidad, la CB, ha demostrado una mayor pérdida ponderal mantenida a largo plazo, una reducción de la mortalidad tanto total como cardiovascular (CV), mejoría o remisión de los factores de riesgo CV y de otras comorbilidades asociadas a la obesidad, así como mejor movilidad y calidad de vida.
Presenta riesgos similares a otras intervenciones quirúrgicas abdominales, con la obesidad como factor de riesgo añadido. No obstante, la mortalidad después de este tipo de cirugía es menor al 1%, siendo en centros especializados incluso inferior al 0,3%, con una morbilidad menor al 7%.
Los procedimientos quirúrgicos más comúnmente realizados en el momento actual son la gastrectomía vertical (GV) y el bypass gástrico en Y de Roux (BGYR), preferiblemente mediante abordaje laparoscópico.