Introducción
El diagnóstico precoz de la enfermedad de Alzheimer mediante la utilización de biomarcadores podría facilitar la instauración y monitorización de intervenciones terapéuticas tempranas con potencial capacidad para modificar significativamente el curso de la enfermedad.
Desarrollo
Los biomarcadores clásicos de líquido cefalorraquídeo y de neuroimagen estructural y funcional aprobados tienen una aplicación clínica limitada, dado su carácter invasivo o su elevado coste. La identificación de biomarcadores más accesibles y menos costosos, como los sanguíneos, facilitaría su aplicación en la práctica clínica. Se presenta una revisión bibliográfica de los principales biomarcadores bioquímicos sanguíneos con potencial utilidad para el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer.
Conclusiones
Los biomarcadores sanguíneos son coste y tiempo efectivos con respecto a los marcadores de líquido cefalorraquídeo. Sin embargo, la aplicabilidad inmediata de los biomarcadores bioquímicos sanguíneos en la práctica clínica es poco esperable. Las principales limitaciones estriban en la dificultad para la medición y estandarización de los umbrales entre los diferentes laboratorios y en los fallos de replicación de resultados. Entre todas las moléculas estudiadas, los biomarcadores de apoptosis y neurodegeneración, al igual que los paneles de biomarcadores obtenidos mediante aproximaciones ómicas —como la metabolómica de forma aislada o combinada— ofrecen los resultados más prometedores.