La fibrosis quística es una enfermedad genética y grave causada por variantes en el gen CFTR. Aunque se trata de una enfermedad multisistémica, la afectación respiratoria es la que produce mayor morbimortalidad. Los moduladores de CFTR (CFTRm) han supuesto un avance terapéutico al mejorar la función de esta proteína. Ivacaftor, el primer CFTRm, mostró una mejora significativa tanto en la función pulmonar como en la calidad de vida en pacientes con algunas variantes gating. Sin embargo, solo un pequeño porcentaje de pacientes en España es elegible para su uso. Para pacientes con la variante más frecuente (F508del), se desarrollaron combinaciones de correctores y potenciadores, como lumacaftor-ivacaftor y tezacaftor-ivacaftor, aunque con beneficios limitados. La triple terapia elexacaftor-tezacaftor-ivacaftor ha demostrado una mejora notable tanto en aspectos respiratorios, digestivos, nutricionales, así como en la calidad de vida, lo que ha cambiado el manejo de la FQ en aquellos en los que están indicados. El impacto también se refleja en un aumento de la esperanza de vida y una reducción de la mortalidad y el trasplante pulmonar. En el ámbito hepático y pancreático, aunque los CFTRm muestran efectos prometedores, se requiere mayor investigación. El tratamiento con CFTRm ha supuesto un cambio en el estado nutricional de los pacientes, reduciendo el riesgo de malnutrición, pero aumentando el de obesidad. Se está investigando su uso en otras variantes menos frecuentes y su potencial aplicación prenatal. A pesar de estos avances, aún existe un grupo de pacientes no aptos para el tratamiento con moduladores o terapias altamente eficaces.