Introducción
La aplicación de toxina botulínica es el procedimiento no quirúrgico más realizado según la Sociedad Americana de Cirugía Plástica. La descripción y comprensión de los patrones de contracción del tercio superior facial se ha convertido en un elemento fundamental a considerar para una buena aplicación de toxina botulínica, permitiendo lograr una adecuada neuromodulación.
Objetivo
describir los patrones de contracción en la zona glabelar, frontal y orbicular en pacientes que acudieron a la consulta de dermatocosmiatría en un centro de especialidades chileno.
Métodos
se realizó un estudio observacional descriptivo. Se reclutaron pacientes entre 18 y 70 años, que no se hayan aplicado toxina botulínica en los 8 últimos meses y no más de 3 aplicaciones previas. Se realizó un registro fotográfico estandarizado en contracción de las zonas glabelar, frontal y orbicular. Estas fotografías fueron analizadas por 3 expertas en dermatocosmiatría, definiendo por convención el patrón de contracción por zona para cada paciente.
Resultados
La muestra total fue de 372 pacientes, 320 mujeres y 52 hombres. Los patrones de contracción predominantes tanto en hombres como mujeres fueron el omega en la zona glabelar con 196 pacientes (52,7%), el frontal completo con 286 pacientes (76,9%), y el orbicular completo con 228 pacientes (61,2%).
Conclusiones
Conocer los patrones de contracción muscular del tercio superior facial más frecuentes en nuestra población permite realizar una correcta evaluación de los pacientes previo al procedimiento, mejorando la técnica de aplicación de toxina botulínica y obteniendo mejores resultados.