En el presente artículo abordamos tres síndromes clínicos infecciosos con diferentes gérmenes como causantes, pero tienen en común que las manifestaciones que presentan son a nivel genital. Algunos son estrictamente originados por gérmenes de transmisión sexual, pero otros no. Hablaremos en este capítulo de las vulvovaginitis, de la lesión ulcerada genital y del virus del papiloma humano, tres grandes entidades que presentan una tasa no menospreciable de consulta en atención primaria, en aumento en los últimos años, y que como profesionales de salud debemos saber abordar por completo, desde su manejo diagnóstico, pasando por su correcto tratamiento y finalizando con los posteriores controles. En estas entidades es tan importante el correcto abordaje como el saber recomendar la prevención, el estudio de contactos y los cribados de otras infecciones que pueden presentarse concomitantemente.