La organización contó ya en el pasado (fue creada en 1973) con un presidente español, pero es verdad que soy el primero desde que el ICCO trasladó su sede a Abiyán (Costa de Marfil). Mi elección como presidente del consejo del ICCO para este año cacaotero (desde el 1 de octubre de 2023 hasta el 30 de septiembre de 2024) es un reconocimiento a la importancia de la UE como importadora de grano de cacao (cerca del 48% de la producción mundial) y, en particular, de España, que ocupa ya, en el seno de la UE, el sexto puesto en comercio de productos semiacabados, el tercero en consumo de chocolate y el cuarto procesando cacao.