Las cicatrices hipertróficas son una complicación conocida que afecta entre el 32 y el 94% de los sobrevivientes de quemaduras. Se caracterizan por vascularización alterada, discromía, cambios estructurales, aumento de la tensión y anormalidades en piel sana perilesional. Esto genera dolor, prurito, contracturas debilitantes, desfiguración y estigmatización, con el consiguiente deterioro funcional y psicosocial, reduciendo así profundamente la calidad de vida de los afectados y asociándose a importantes costos para los sistemas de salud. Los avances en terapia láser, especialmente la introducción de láseres ablativos fraccionados, ha permitido incluso reemplazar la cirugía en algunos casos, o ser utilizada antes para suavizar cicatrices y así, potencialmente, mejorar los resultados quirúrgicos y cosméticos. Los láseres ablativos fraccionados CO, por sí solos, pueden producir mejoría clínica de cicatrices al destruir de forma más específica componentes dérmicos y permitir la remodelación de la cicatriz, mejorando el prurito, dolor y flexibilidad. Incluso, como monoterapia, mejoran en forma estadísticamente significativa la puntuación en los resultados en escalas de evaluación de cicatrices, como Vancouver Scar Scale y Patient and Observer Scar Assessment. Esta revisión bibliográfica busca entregar una visión actualizada del manejo de cicatrices de quemaduras, destacando la utilidad y beneficios de la terapia láser, particularmente profundizando en los atributos del láser ablativo fraccionado CO como herramienta terapéutica en constante desarrollo y con evidencia creciente que avala su recomendación.