El acné fulminans (AF) es una forma rara y grave de acné inflamatorio. La intensidad de las lesiones cutáneas y las cicatrices secundarias impactan negativamente en la calidad de vida. Presentamos una revisión narrativa de casos de AF publicados en Medline. Se incluyeron artículos escritos en lengua castellana o inglesa, que reportasen casos aislados o series de casos de AF, de los que se recogieron variables clínico-demográficas. El objetivo principal de la revisión fue describir las características clínico-demográficas del AF. Secundariamente se pretendió determinar si la localización o la extensión lesional repercuten en la calidad de vida. Se revisaron 212 casos de AF incluidos en 91 artículos (edad media: 16,6 años, 91,94% varones). El 97,63% de los pacientes presentaron acné previo al brote de AF y el 54,90% contaba con antecedentes familiares de acné. En el 44,79% existió un factor desencadenante de AF (98,63% farmacológico: 65,28% isotretinoína). Las localizaciones más habitualmente afectas fueron cara (89,31%), tronco posterior (77,86%) y anterior (74,81%). El subtipo predominante fue el AF asociado a síntomas sistémicos (59,12%). Entre los síntomas sistémicos destacó la sintomatología general (97,06%). El tratamiento más prevalente fue la corticoterapia sistémica (81,03%). La repercusión del AF en la calidad de vida se reportó en 2 pacientes. Como conclusiones, el AF predomina en los varones adolescentes con antecedentes de acné vulgar, afectando fundamentalmente a la cara y el tronco. La forma más frecuente es el AF con síntomas sistémicos. Para su tratamiento, los corticoides sistémicos son los fármacos más frecuentemente empleados. La repercusión del AF en la calidad de vida está infrarreportada.