Mycobacterium tuberculosis genera infecciones que llegan a tener una alta prevalencia en pacientes inmunodeprimidos y con menor frecuencia en pacientes inmunocompetentes. Lesiona comúnmente al pulmón; sin embargo, también infecta otros órganos como el sistema nervioso central. Los abscesos tuberculosos son una forma de presentación de esta infección, siendo el método diagnóstico la punción-aspiración o biopsia quirúrgica. Según la evolución clínica, la resolución de los abscesos tuberculosos será quirúrgico o farmacológico. Se presenta el caso de una paciente joven de 14 años de edad, con antecedentes de tuberculosis (TB) pulmonar hace seis meses, quien concomitantemente recibía terapia inmunosupresora para lupus eritematoso sistémico (LES). La paciente debuta con cuadro clínico de fiebre y paresia braquio-crural izquierda; tras estudios imagenológicos y microbiológicos se diagnostica un absceso cerebral tuberculoso que se trató de manera farmacológica y con cirugía descompresiva, evolucionando satisfactoriamente.