Introducción
las características clínicas y el tratamiento recibido por los pacientes hospitalizados por COVID-19 han ido modificándose con el tiempo. El objetivo fue analizar la evolución clínico-terapéutica de los pacientes en las ondas epidémicas y estimar un modelo predictivo de la mortalidad.
Métodos
estudio observacional de cohortes retrospectivo considerando los pacientes ingresados con infección confirmada por SARS-CoV-2 hasta marzo de 2022. Se recogieron variables sociodemográficas, comorbilidades y tratamientos, y se creó un modelo predictivo de fallecimiento mediante regresión logística multivariante.
Resultados
se incluyeron 1.784 pacientes. Se encontraron diferencias entre las ondas epidémicas con respecto a la edad, sexo, hipertensión arterial, diabetes mellitus, obesidad y enfermedad renal crónica. Ceftriaxona, azitromicina, hidroxicloroquina, metilprednisolona y lopinavir-ritonavir fueron los fármacos más frecuentemente utilizados en la primera onda. Amoxicilina, dexametasona y tocilizumab se prescribieron en mayor frecuencia en ondas sucesivas. El porcentaje de fallecimientos varió desde un 5,6% en la cuarta onda a un 14,1% en la tercera (p<0,001). Los factores resultantes asociados con la mortalidad (OR; IC 95%) fueron el ingreso en UCI (56,5; 27,4-121), la edad (1,09; 1,08-1,11), los días de ingreso (0,98; 0,96-0,99), la enfermedad renal crónica (1,67; 1,16-2,40) y haber recibido tratamiento con tocilizumab (2,49; 1,43-4,30), dexametasona (1,58; 1,10-2,26) y metilprednisolona (2,46; 1,63-3,68). El área bajo la curva alcanzado por el modelo fue de 0,863.
Conclusiones
parecen existir diferencias clínico-terapéuticas en los pacientes durante las 6 primeras ondas epidémicas. El conocimiento de los factores de riesgo de mortalidad permitirá la detección de los pacientes hospitalizados con mayor riesgo y optimizar precozmente su manejo terapéutico.