El número de personas con inmunodepresión está aumentando considerablemente debido a su mayor supervivencia y al empleo de nuevas terapias inmunosupresoras en diversas patologías crónicas. Se trata de un grupo heterogéneo de pacientes en los que la vacunación como arma preventiva supone uno de los pilares básicos de su bienestar, por su elevado riesgo a padecer infecciones. Este consenso, elaborado conjuntamente entre la Sociedad Española de Infectología Pediátrica (SEIP) y el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP), aporta unas directrices para programar un calendario adaptado a cada paciente en situaciones especiales que incluye recomendaciones generales, vacunación en pacientes con trasplante de médula y trasplante de órgano sólido, vacunación en niños con errores innatos de la inmunidad, vacunación en el paciente oncológico, vacunación en pacientes con enfermedades crónicas o sistémicas y vacunación en niños viajeros inmunodeprimidos.