El shock cardiogénico (SC) es un proceso patológico multifactorial con alta morbimortalidad. Cuando ocurre en relación con el entorno perioperatorio de cirugía cardiovascular, elementos como causa de la cirugía (preoperatorio), procedimiento realizado (intraoperatorio), eventos anestésicos y fenómenos fisiopatológicos postquirúrgicos precoces y tardíos (postoperatorio) pueden afectar negativamente los resultados del paciente. En este contexto, y como consecuencia de la gran heterogeneidad de fenómenos fisiopatológicos relacionados a una causa única o múltiples del shock cardiogénico (pre, intra y postoperatorio), es imprescindible un enfoque multidisciplinario que abarque todos los aspectos de la clínica del paciente para decidir el tratamiento más adecuado para cada escenario que evalúelos riesgos de cada tratamiento y proyecte una posible evolución del cuadro. La oxigenación por membrana extracorpórea veno-arterial (ECMO-VA) entrega un soporte hemodinámico y de oxigenación más sólido que otros soportes, reemplazando parcial o totalmente los sistemas cardíaco y respiratorio del paciente. El ECMO-VA periférico puede instalarse rápidamente al lado de la cama en el caso de pacientes gravemente inestables. El ECMO-VA central tiene la ventaja única de servir como soporte estable en el caso de shock cardiogénico posterior a la cardiotomía y se puede convertir fácilmente mediante las inserciones de cánulas para el bypass cardiopulmonar, constituyendo un puente para toma de decisiones. La elección de la configuración adecuada (periférico o central) dependerá, por tanto, de la causa que generó el shock cardiogénico y lo agudo del cuadro, por lo que la estrategia más adecuada de manejo debe ser realizada por un equipo multidisciplinario a modo de velar por un diagnóstico y tratamiento más temprano y asegurar la preservación de la función miocárdica al considerar todas las posibles complicaciones derivadas de cada tipo de soporte