En Chile, el 70% de la población de 15 años y más vive con multimorbilidad, es decir, con la presencia de dos o más condiciones crónicas de forma simultánea. El abordaje clásico de la cronicidad por programas en atención primaria de salud, con foco en la enfermedad, se expresa en cuidados fragmentados, ineficaces y muy alejados de los principios de centralidad en la persona, integralidad y continuidad del cuidado impulsados desde el modelo de atención integral de salud familiar y comunitario (MAIS). La estrategia de cuidado integral centrado en las personas para la promoción, prevención y manejo de la cronicidad en contexto de multimorbilidad (ECICEP), se constituye en una respuesta a esta problemática.
La multimorbilidad representa un desafío de gran envergadura en el rediseño desde una atención fragmentada hacia el cuidado integral centrado en la persona. Implica un proceso de gestión del cambio, en donde es necesario sensibilizar en la urgencia y sentido del cambio, estratificar a la población según riesgo, capacitar a los equipos de salud, reorganizar los procesos administrativos (agendamiento, registro clínico) y clínicos (ingreso y control integral, planes de cuidado consensuados, gestión del cuidado, seguimiento a distancia, automanejo), así como favorecer el liderazgo y acompañamiento del cambio y el trabajo colaborativo en red.
Este proceso requiere voluntad política, con sentido de urgencia del cambio y gradualidad, para que su instalación sea eficiente y respetuosa. Por ello, se inicia el proceso con las personas de alta complejidad, que son quienes tienen más riesgo de hospitalizaciones evitables y otras complicaciones.