
Un nuevo estudio sugiere que una firma genética común puede aumentar el riesgo de que una persona desarrolle trastornos por consumo de sustancias, independientemente de si la adicción es al alcohol, al tabaco, al cannabis o a los opiáceos.
Un nuevo estudio sugiere que una firma genética común puede aumentar el riesgo de que una persona desarrolle trastornos por consumo de sustancias, independientemente de si la adicción es al alcohol, al tabaco, al cannabis o a los opiáceos.