El asma grave constituye un síndrome heterogéneo con múltiples variantes clínicas y representa el último peldaño en la patología asmática en relación con su gravedad. La prevalencia del asma grave entre los pacientes asmáticos varía de un país a otro, y se estima que el 50% de estos pacientes graves tienen un mal control de su enfermedad. Para el mejor manejo del paciente es necesario un correcto diagnóstico, el seguimiento y sin duda ofrecerle el mejor tratamiento disponible, incluyendo los nuevos avances farmacológicos, como son los anticuerpos monoclonales. Con este afán nació este proceso de consenso, cuya finalidad última es ofrecer al paciente el mejor manejo posible de su enfermedad para así minimizar su sintomatología. Las recomendaciones que se proponen son el resultado de un consenso de tipo nominal desarrollado a lo largo del año 2019 y fueron validadas en sucesivas revisiones posteriores.